Despídase de los portazos en su inmueble

Los portazos, aparte de ser muy ruidosos, el riesgo del daño físico en caso de que alguien queda atrapado entre el marco y la puerta en el momento del portazo, también está el daño que recibe toda la estructura de la puerta, con el avance del tiempo, si estos portazos o azotes de puertas no son corregidos, pueden acarrear graves consecuencias al propietario o cualquier habitante del inmueble.

Existen algunos métodos o sistemas que pueden ayudar a mejorar esta situación, garantizando no sólo la seguridad de su puerta, también la de sus seres queridos.

Burlete

Aunque este dispositivo se utiliza en puertas y ventanas para mejorar el aislamiento térmico en las viviendas, es posible que su cerrajero Eixample de confianza esté de acuerdo con el hecho de que el burlete de doble royo puede ayudar a evitar los portazos, gracias al reborde que va debajo de la puerta, el cual tiene una superficie suave que logra que el contacto con el marco sea suave, porque amortigua el golpe, impidiendo el portazo.

Sustituir el resbalón

En ocasiones, el ruido que emite la puerta al cerrar es de gran magnitud que puede ser confundido con un portazo, pero en realidad es el resultado de un resbalón que no se desliza de manera correcta, y genera el ruido cuando éste golpea de manera continua contra el marco de la puerta. En este caso, sólo es necesario solicitar a su cerrajero el reemplazo de esta pieza o la cerradura completa, dependiendo del modelo.

Instalar un mecanismo de cierrapuertas

Los cierrapuertas son dispositivos que permiten que las puertas cierren lentamente, de esta manera impiden los molestos y peligrosos portazos. Existen diferentes alternativas:

Bisagras con muelle de retorno. Sustituyen las bisagras tradicionales, garantizando un cierre automático de la puerta.

Pernios con muelle de retorno. Similar al elemento anterior, sólo que en lugar de ser bisagras, son pernios, pero la función es la misma, controlar el cierre de la puerta de manera automática.

Muelles de brazo. Es un dispositivo que se agrega a la puerta, es decir, no es necesario desmontar la hoja de la puerta para hacer alguna sustitución, pero si controla el cierre de la puerta.

Retenedores. Es un freno al momento del cierre de la puerta, aunque no contiene un muelle que logre el efecto de cierre automático.